martes, 24 de mayo de 2011

¿Qué pasa en España?

La gente se autoconvoca. La Puerta del sol se va llenando de jóvenes, mayoritariamente. El "virus" del descontento parece haber saltado el Mediteráneo y se propaga a varias ciudades españolas más. No hay líderes visibles. Se discute, se reflexiona, se realiza asambleas, la democracia real va surgiendo de manera difusa, embrionaria, diríamos. Surge una idea, una frase, síntesis del sentimiento y el pensamiento colectivo: "no estamos contra el sistema, el sistema está contra nosotros". En una primera lectura, brillante; en la Argentina decíamos "que se vayan todos" (pero se quedaron) era anárquica, en sentido lato, manifestaba el profundo descontento con la clase política como simple suma de individuos descalificados por sus propias actitudes; debo reconocer que la surgida en Madrid  da un paso más adelante: identifica el origen profundo de la situación que se combate de manera incuestionable: el sistema, democracia que de tal solo guarda las formas, con instituciones en proceso de transformación (si no terminado) de convertirse en cáscaras vacías que no representan a nadie más que los intereses de una burguesía de tendencias parasitarias y totalmente insensible a las necesidades concretas de la gente real; al PSOE ya le están sobrando dos letras, porque partido es, desde luego, español, obviamente, pero poco y nada le queda de socialista y obrero. 


Rodríguez Zapatero aplicó las recetas económicas de la Unión Europea, que no son otras que las  tristemente célebres del FMI, que ya bien conocemos en América Latina, abjurando de toda postura, si no socialista, cuanto menos progresista.


Entonces surgen dos actitudes para las elecciones: primero, el descontento de quienes esperaban revertir con el PSOE la negra noche de Aznar y que vieron frustradas sus esperanzas y que solo optaron por el "voto castigo" favoreciendo paradójicamente al enemigo declarado de sus aspiraciones, y segundo, el pavor de las clases dominantes, devotas de "la ley y el orden", espantadas ante las dimensiones que toma la protesta, que los llevó a refugiarse en aquél que saben que defenderá sus privilegios y el mantenimiento del statu quo, no vaya a ser que el pueblo movilizado los desplace del poder.


De ahí puede hacerse la experiencia de entender que "no es cuestión de cambiar de collar, sino dejar de ser perro" (Arturo Jauretche). Estos aires de Mayo Francés que parecen acariciar los rostros de los manifestantes pueden que los lleven a entender que ya que el sistema está en su contra, no queda otra que combatirlo. Que esa democracia formal y hueca le es funcional a un sistema que frente al feudalismo, el absolutismo monárquico, o el poder eclesiástico a los que opuso la iniciativa privada, fue por ello revolucionario en su tiempo pero que hoy es esclavizante, opresor y salvaje: el capitalismo

miércoles, 4 de mayo de 2011

"Misión Imposible" real + "Brigada A"

Los helicópteros no despegaron de base alguna del país. Tampoco el gobierno fue informado de la operación.
Fue una invasión lisa y llana, en el más puro estilo de Misión Imposible, solo que luego divulgada. ¿Y la soberanía? Bien, gracias.

La operación tenía un solo propósito: matar. ¿Alguien puede decirme qué tipo de resistencia puede ofrecer un hombre desarmado frente a un grupo de soldados armados hasta los dientes? La desfachatez del gobierno de los EE. UU. no tiene límites. Combate al "terrorismo" con un terrorismo mayor. ¿Cuál es el mensaje? Si no se avienen a lo que nosotros queremos imponerles son nuestros enemigos, si son nuestros enemigos son terroristas, si son terroristas los matamos. Así de simple.

"El que tiene las armas solo entiende el lenguaje de ellas" y los EE. UU. son el país más belicoso y armado de la Tierra; adora las armas, el complejo militar-industrial de ese país es poderosísimo y necesita de la proliferación de guerras en cualquier parte del planeta.

"Se hizo justicia", dijo Obama. ¿Are you sure, Mr. President? ¿Dónde está el tan cacareado derecho a un juicio justo? Cuando un grupo revolucionario dicta una sentencia a muerte en un juicio así calificado ponen el grito en el cielo y lo rotulan lisa y llanamente de asesinato ¿Y esto qué fue?
Esta es definitivamente una acción terrorista. Brutal en su ejecución y sutil en sus consecuencias; no murieron civiles indiscriminadamente, no fue un bombazo en un restaurante, se mató a un "demonio" fundamentalista, tan fundamentalista como Bush, pero se resucitó otro: Al-Qaeda, el "fantasma necesario" para agitar frente a otros países para justificar la presencia bases militares estadounidenses en sus territorios para cooperar en la "lucha contra el terrorismo" y en defensa de la "democracia" y la "libertad". (De paso. Si esa defensa fuera cierta ¿por qué no vinieron a la Argentina a sacar a Videla y su comparsa de desaparecedores de personas, torturadores y ladrones de bebés?)


¡Cómo se llenan la boca con tales palabras! Con una "pequeña" aclaración: se trata de la democracia y la libertad impuestas por los borceguíes de los marines, la paz made in USA, no vaya a ser que la masa inculta de países que no obtuvieron la bendición que los EE. UU. recibieron de Dios, que los convirtió en sus elegidos para vigilar el "correcto" funcionamiento del Mundo, se resistan a adoptar el American way of life.